Juguetes para aprender a montar en bici
Aprender a montar en bici es ofrecer a los niños la posibilidad de desarrollar nuevas habilidades mientras disfrutan de la vida al aire libre.
Aporta muchos beneficios al crecimiento de los pequeños porque integra los diferentes aspectos del ser humano.
Juguetes para aprender a montar en bici
Las bicicletas sin pedales es uno de los mejores juguetes para aprender a montar en bici ya que podrá desarrollar con ella el sentido del equilibrio y el manejo del manillar, además del freno.
Otros juguetes para aprender a montar en bici son el triciclo y el correpasillos.
Triciclos
El triciclo presenta muchas ventajas para los niños ya que estimula su desarrollo psicomotor. Es ideal para los pequeños entre los 12 a 18 meses, extendiéndose su uso hasta los 3 años.
Las posibilidades de movimiento que les ofrece a los niños resultan muy atractivas ya que pueden decidir hacia donde ir y a una velocidad importante.
Es por ello que el triciclo permite que el niño: fortalezca los músculos de las piernas debido al pedaleo; incremente la coordinación entre piernas y brazos; desarrolle independencia ya que no es necesario que el adulto intervenga; permite que el niño desarrolle seguridad y confianza volviéndose cada vez más autónomo y canaliza su energía a través de la actividad física por lo que mejorará su calidad de sueño.
Correpasillos
Los correpasillos estimulan los primeros pasos de los niños y estimulan su intelecto e imaginación ya que traen incorporados juegos didácticos.
El correpasillos brinda las primeras herramientas para el movimiento además de mejorar la coordinación óculo manual. Puede ir hacia donde quiere, decisión que toma solito. De a poco el niño comienza a estabilizar su andar gracias al correpasillos.
Bicicletas
Los niños que disfrutan de montar en bicicleta son niños felices y sanos. Además, si es una actividad que comparten con los padres los hará mucho más felices.
Pedalear y enfrentarse a diferentes caminos, algunos con subidas o bajadas, fortalece la musculatura general del cuerpo y mejora la posición de la columna al reforzar los músculos de la zona lumbar.
El fortalecimiento general del cuerpo que brinda montar en bicicleta se traduce también en un fortalecimiento del sistema inmunológico.
Accesorios que se necesitan cuando se aprende a montar en bici
Los accesorios que suelen utilizarse para aprender a montar en bici y que sirven para que su aprendizaje sea seguro son:
Ruedines
Los ruedines son ideales para aprender a montar en bici. Es un accesorio muy simple de colocar, seguro y fácil de sacar cuando el niño esté listo para montar en bicicleta sin los ruedines.
A veces es necesario colocarlos cuando el niño cambia de bicicleta, eso le dará seguridad.
Los ruedines se van cambiando a medida de que el niño va creciendo y suelen usarse hasta los 8 o 10 años, o mide entre 1,50 a 1,60 metros.
Si bien los ruedines ayudan a dar los primeros pasos en el aprendizaje, es saludable ir quitándoselos paulatinamente. Se podría decir que son casi indispensables cuando el pequeño sentado en la bici no toca el suelo con sus pies.
Los ruedines tienen: ruedas macizas de goma ABS; un diámetro de 11,5 cm con un ancho de 2,5 cm.; la estructura es de acero resistente y se consiguen en diferentes colores. Algunos tienen luces incorporadas que se encienden cuando giran.
Casco
El casco es una protección necesaria desde que el niño se sube a un triciclo y con más razón cuando comienza a montar en bicicleta.
Buscando la mayor protección y seguridad, se han diseñado una gran cantidad de cascos redondeados, con un sistema de ventilación que no genere transpiración y con una forma que se adecua perfectamente a la cabeza de los pequeños de distintas edades.
También son ajustables, con dibujos divertidos y colores llamativos.
Otro tipo de protección que brinda el casco es con respecto a la luz solar sin quitar la línea de visión que debe ser amplia. La visera protege del reflejo solar sin reducir la visión.
La superficie protectora tiene que ser bien resistente para aguantar golpes en la cabeza y en los oídos.
Además, no tiene que ser pesado por lo que este punto se debe considerar antes de comprarlo.
También disponen de un protector para la barbilla con una correa ajustable. Éste tiene que ser suave para no irritar la piel del pequeño.
Si tienes dudas sobre qué talla tiene que tener el casco, para que te des una idea en general es de 44 a 50 cm para los bebés; para niños pequeños, entre 48 y 55 cm y para los más grandes, entre 52 y 58 cm.
Estos valores se basan en la circunferencia de la cabeza de los niños. Recuerda que no es una buena idea comprar un casco que le quede grande con la intención de que pueda usarlo más tiempo. Al no ajustar la cabeza no será una buena protección ya que podrá correrse al momento del golpe. Asegúrate que el casco que compres cumpla con la norma de seguridad Snell B90.
Protecciones
Entre las protecciones que pueden usarse para montar en bicicleta, se encuentran: los guantes, las rodilleras, las coderas y, por supuesto, el casco del que hablamos anteriormente.
Los guantes para montar en bicicleta tienen que ser confortables, con un buen relleno, que no deslicen y que permitan a la piel respirar.
Las rodilleras y coderas suelen venderse como un juego, aunque podrás también encontrarlas por separado.
Es importante que estos accesorios que brindan seguridad a los pequeños sean de un material de calidad y lavable. Las almohadillas deben ser resistentes para absorber el impacto en caso de caídas.
Beneficios de aprender a montar en bici
En el aspecto intelectual
Organiza el esquema corporal en su mente, desarrolla la coordinación y el equilibrio. Además le brinda una nueva perspectiva del espacio que le rodea. También beneficia a su salud mental porque lo mantiene concentrado y enfocado en sus objetivos.
En el aspecto corporal
Montar en bici permite fortalecer sus músculos y brindar seguridad a sus movimientos. La bicicleta los mantiene activos y saludables. De hecho, descansan mucho mejor por la noche. Es por ello que esta actividad está especialmente recomendada para niños que no pueden dormir solos. Aprender a montar en bici les ayuda a superar sus límites y también sus miedos.
En el aspecto emocional
Con esta actividad el niño aprende a ser independiente y a disfrutar de la actividad al aire libre, además de ser un motivo para relacionarse con adultos y otros pequeños. Estimula el respeto, la camaradería, el sentido del humor, mejora la autoestima, combate los sentimientos negativos, elimina el estrés y la ansiedad, etc.
Aprender a montar en bici, además, activa un ciclo de supervivencia esencial en el cerebro. En este órgano se genera una hormona llamada Leptina, también conocida como la hormona de la saciedad. Ella indica al cuerpo los niveles de energía que tiene y cuando éstos están bajos, motivan el hecho de comer o realizar actividad física como correr o montar en bicicleta. Esta es otra gran ventaja ya que si se reemplaza el hecho de comer por actividad física, es ideal para las personas que necesitan bajar de peso, en este caso, para los niños que desde temprana edad muestran indicios de obesidad.
La actividad física también libera la hormona dopamina que es la que genera sensación de placer y un bienestar general en el organismo. Cuanto más se monta en bicicleta, más ganas se tienen de seguir pedaleando.
No hay que olvidar que montar en bicicleta es muy beneficioso para el medioambiente ya que no contamina. No genera emisiones de carbono, son prácticas y no hay problemas de aparcamiento, además de no emitir ningún ruido. Todo esto hace que la bicicleta sea el mejor medio de transporte ya que es rápida, saludable y no contamina. Cuando tu hijo crezca podrá moverse solo sin que tengas que buscarlo a todos lados. Dependiendo de la edad del niño hay distintos juguetes que le ayudarán en esta etapa a aprender a montar en bici.
¿A qué edad iniciar a tu hijo a montar en bici?
A partir de los 3 años, el niño dispone de un control motriz que le permite aprender a montar en bici. Es capaz de coordinar sus piernas con sus brazos por lo que comprenderá con facilidad cómo es la dinámica de la bicicleta.
Entre los 4 y 5 años ya dispone de las habilidades necesarias para montar en bicicleta con los pedales colocados, impulsándose con un pie y utilizando los pedales correctamente.
Si el niño aprende después de los 5 años, conviene colocarle ruedines laterales y no sacarle los pedales. A esta edad es probable que el pequeño sienta un poco de temor y los ruedines se aconsejan para que les facilite el equilibrio.
En cuanto el niño domine las posibilidades de la bici en cuanto a pedalear, doblar, frenar y esquivar los obstáculos será el momento de quitar los ruedines. A veces se quita uno solo mientras el otro se deja para que tenga un apoyo, aunque hay personas que prefieren quitar los dos juntos.
De cualquier manera y por un tiempo es conveniente que un adulto vaya agarrando el asiento desde la parte de atrás y correr un poco para darle impulso, además de sensación de seguridad, hasta que el niño entienda cómo funciona el tema del impulso y el equilibrio.
Montar en bicicleta es una de las mejores experiencias que se le puede brindar a un niño. No la dejes pasar porque retrasar el aprendizaje para cuando sea un adulto no es lo mismo y habrás privado a tu pequeño de un increíble mundo de diversión y aventuras. Además, hoy en día, existe una gran cantidad de juguetes para aprender a montar en bici que facilitarán su aprendizaje.
Etapas para enseñar a un niño a montar en bici
En la primera etapa para aprender a montar en bici, conviene que el niño suba a la bicicleta o a un correpasillos y avance con los pies en el suelo. Es decir, se retiran los pedales de la bici y se ajusta el asiento para que le resulte sencillo poder apoyar los pies en el suelo y avanzar andando con ellos. Es necesario que apoye el pie completo y no solamente las puntas. Desde esta etapa se aconseja que use el freno de vez en cuando para que vaya conociéndolo.
La segunda etapa para aprender a montar en bici, es dominar el equilibrio. En esta etapa se le pide al pequeño que se impulse, levante sus pies y controle que la bici haga una marcha equilibrada. Luego se le pedirá que haga lo mismo girando el manillar de la bici para que pueda aprender a girar.
La tercera etapa para aprender a andar en bici, es colocar los pedales y empezar a pedalear. Primero se le pide que lo haga con un solo pie, alternando el lado y el otro en el suelo. Luego se le pedirá que suba los dos pies a los pedales y que pedalee con ambos pies.
La cuarta etapa para aprender a montar en bici, es el perfeccionamiento de lo aprendido en la etapa anterior, estabilizando el equilibrio, controlando la dirección ya sea que quiera ir en línea recta o quiera girar.
Recuerda que en cada etapa debes reforzar el aprendizaje sobre el uso del freno y el hecho de detener la bici. Ayúdate de los distintos juguetes que se ofrecen en el mercado para ayudar a tu hijo a aprender a montar en bici.
Errores al enseñar a un niño a montar en bici
Entre los errores más frecuentes que se cometen al enseñar a montar en bicicleta se encuentran:
- Practicar desde el principio en el medio de la calle: hasta no lograr el suficiente equilibrio no es conveniente andar en la calle porque el tránsito no brinda la seguridad que necesita esta etapa.
- El uso de ruedines no se aconseja: lo ideal es bajar el asiento para que el niño llegue con los pies al suelo y con ellos pueda impulsarse.
- Usar como primera bici alguna que no tenga los ajustes necesarios: estos ajustes tienen que ver con el tamaño que tenga el niño y el tamaño de la bici.
- Presionar el aprendizaje: recuerda que cada niño tiene su tiempo y forzarlo siempre es contraproducente.
Aprender a montar en bici es una excelente experiencia para tus hijos porque les brinda la posibilidad de divertirse mientras se pasea de un lado a otro logrando una buena ejercitación de todos sus músculos, mientras vive inolvidables aventuras en paisajes naturales con gran independencia.